Conclusión
Este Barómetro 2024 revela la valentía de los europeos. Aunque siguen siendo tiempos difíciles para los consumidores, en 2023 demostraron una impresionante capacidad de adaptación. Se están organizando para hacer frente a la presión que la inflación y el aumento del coste de la vida ejercen sobre sus presupuestos. Aunque la inflación ha bajado este año, sigue estando en el centro de las preocupaciones de los ciudadanos, lo que les lleva a ajustar sus opciones presupuestarias e incluso a renunciar a algunas compras. Hoy en día, nadie se libra de tener que hacer concesiones, ni siquiera las rentas altas.
¿Ha pasado lo peor? Los europeos viven invariablemente con una gran incertidumbre. Sin embargo, hay un rayo de esperanza en el horizonte. Según la Comisión Europea, el aumento de los salarios, el crecimiento continuado del empleo y la caída de la inflación deberían impulsar el poder adquisitivo en 2024 y 2025, lo que a su vez debería estimular el consumo.
Estas previsiones positivas aún parecen lejanas para muchos europeos, sobre todo con el repunte de la inflación en diciembre. Por supuesto, será importante vigilar los niveles de ahorro. De hecho, la subida de los tipos de interés podría animar a los europeos a ahorrar más, como confirma nuestro Barómetro 2024 del Observatorio Cetelem.
Pero podemos estar seguros de que la situación habrá mejorado para cuando se publique el próximo Barómetro del Observatorio Cetelem… siempre, claro está, que esta previsión decididamente optimista no se vea desbaratada por otra crisis de gran envergadura.